Durante las clases de “Crea Peques” los niños aprenden habilidades motoras como cortar, pegar, doblar, colorear, pintar y dibujar. Hacen sus propias creaciones con telas, papel y otros materiales. Hacer actividades creativas como manualidades y pintar fomenta la imaginación y la creatividad de los niños pequeños. Desarrollar la creatividad ejercita el lado derecho del cerebro, responsable de las emociones, la estética y la visión especial. Hacer actividades manuales también desarrolla la paciencia, la concentración y la perseverancia.

Los movimientos que aprenden durante las clases son más o menos específicos y coordinados, como utilizar lápices y pinceles, cortar cosas con tijeras y coger y manipular cosas pequeñas. Por lo tanto se desarrollan la psicomotricidad en general y la motricidad fina en particular.